Congreso de unificación

Estudiante: Sobre el congreso. Los amigos que se han distanciado, ¿también deberían ser invitados al congreso?

Laitman: Sí. ¿Por qué no? Nuestro congreso puede estar abierto a toda la humanidad, porque es un congreso de unión al que todos deberían venir. No se trata de un congreso en el que discutimos algunas cosas especiales: lo que está ocurriendo allí en el mundo de los Nikudim o cualquier otra cosa específica o cabalística. Estamos hablando de una sola regla común, la principal y gran regla de la Torá: «ama a tu prójimo como a ti mismo». Estamos hablando de su realización. Por lo tanto, este congreso debe ser amplio, tan abierto como sea posible para todos, incluso para aquellos que no han escuchado una palabra. El problema es que no podrán entenderlo, sentirlo, aceptarlo, tal vez, pero igual. Que haya algún tipo de entrada para ellos también. Yo estoy a favor de que vengan todos.

Estudiante: Rav, esto es sobre los amigos de la decena, que estaban en decenas y salieron.

M. Laitman: Si se alejan, pueden volver a la decena de nuevo. Si una decena decide que los aceptan, entonces sí. Debemos cuidar, en la medida de lo posible, la expansión del Kli. «La grandeza del Rey está en la multitud de personas». Con esto, organizamos nuestros ascensos. Cuanto más amplio sea el Kli, más fácil será que se eleve. Y no podrá subir si no hay una base más amplia y más ancha. Es como cuando se construye una pirámide, debe haber una base ancha. ¿Está claro? Espiritualmente es simple. Cada vez que agregas diez Sefirot, necesitas agregar todas estas Sefirot en inclusión mutua entre ellas, y entonces siempre tienes una expansión natural. Si no añades estas Sefirot adicionales a toda la base, entonces no podrás ascender. El ascenso es el resultado de la inclusión entre las Sefirot.

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